La compra de oro “a distancia” se podría calificar como uno de los chollos del siglo. Estos negocios operan de la siguiente manera:
1.- Ponen anuncios en la tele (preferiblemente por la mañana, que es la franja prime time de los parados), ofreciendo un servicio de compra de oro a distancia. En caso de ser necesario, se recuerda sutilmente a los teleespectadores que la Navidad está cerca y, como tienen los bolsillos llenos de telas de araña, van a tener que privarse del clásico cocktail de gambas y los regalos debajo del abeto (a no ser, claro, que alguien les ofrezca una solución).
2.- Una vez tomados los datos del cliente, la compañía manda a su casa un sobre para que el interfecto introduzca sus artículos de valor y los envíe, de forma gratuita, a la empresa compradora.
3.- Al llegar el paquete a su destino, la compañía tasa los objetos recibidos y le ofrece al cliente una “generosa” contrapartida monetaria.
Hasta aquí todos contentos. El televidente se queda más feliz que una perdiz, al haber recibido un dinerillo por las joyas de la abuela. Por su parte, los responsables de empresa de tele–compra no pueden estar más satisfechos, pues han conseguido aumentar sus depósitos de oro, en un contexto de constantes subidas del precio de este metal.
Pero lo que no le han explicado al que ha entregado su pequeño tesoro por un puñado de euros es que, en el País de las Maravillas, hay truco (como casi siempre).
La BBC, empresa de medios seria donde las haya, se ha currado un fenomenal reportaje al que han puesto por título “What's the 'true' value of your old gold?” [¿Cuál es el “verdadero” valor de tu oro antiguo?].
En este artículo, los chicos de Newsbeat (filial de la BBC) hablan largo y tendido sobre las empresas de tele–compra de oro concluyendo que:
“...some of the biggest names in the industry are paying just a fraction of the amount that gold could be worth if it was taken to a jeweller or pawnbroker”
Para los que no dominen la parla de Shakespeare, ofrezco una traducción libre al español:
“algunas de las empresas más importantes del sector están pagando por el oro sólo una pequeña parte de lo que se podría obtener en una joyería o en una casa de empeños”
Para defender esta tesis, los reporteros llevaron un conjunto de pendientes, cadenas y medallones de oro tanto a una joyería como a un distribuidor independiente, con la misión de obtener una valoración profesional. El precio ofrecido a los periodistas fue de 318 y 300 libras respectivamente.
A continuación mandaron las mismas alhajas a una de las mayores empresas de tele–compra de oro a nivel mundial: Cash4Gold.
Los “tasadores” de esta empresa valoraron los objetos enviados en sólo 63 libras. Dado que se puede pedir la devolución del oro enviado (en caso de que no se esté de acuerdo con la tasación) nuestros protagonistas solicitaron que se les reenviaran sus joyas. Para su sorpresa, el “tasador” que les atendía por teléfono les subió la oferta, en ese mismo instante, hasta las 100 libras. En resumen, aun con la segunda tasación, Cash4Gold les estaba ofreciendo la tercera parte de la cantidad que estaban dispuestos a entregarles tanto el joyero como el distribuidor de oro.
La excusa que pone Jeff Aronson (el mandamás de esta compañía) por los bajos precios que ofrecen a sus clientes es que:
“some people are willing to accept less for their gold in return for convenience and speed”
lo que traducido al español significa:
“algunas personas están dispuestas a aceptar menos dinero por su oro, a cambio de la comodidad y la rapidez”
Por otro lado, esta lumbrera de la clase empresarial argumenta que:
"Our customers are not interested in going to a pawnshop or a jewellery store” … "They would be mortified if a friend saw them doing that"
que en la lengua de Cervantes viene a decir:
“Nuestros clientes no están interesados en ir a una casa de empeños o una joyería” ... “Si un amigo les viera haciendo eso, se sentirían terriblemente avergonzados”
En resumidas cuentas, este “empresario modelo” admite que están pagando una miseria por el oro que compran a los particulares. Por otro lado, parece justificar la razón de ser de su negocio haciéndonos ver lo vergonzoso que puede llegar a ser el hecho de que alguien nos vea visitando una joyería o una casa de empeños (qué sabrá la gente si entramos para comprar o para vender).
Los reporteros de la BBC se tomaron la molestia de repetir la misma operación con la británica CashMyGold (algo así como ConvierteMiOroEnDinero) obteniendo similares resultados:
- Valoración inicial: 60,20 libras (tiene gracia lo de los 20 peniques).
- “Nueva valoración” al pedir que les devolviesen sus joyas: 150 libras.
Este artículo continúa narrando otros casos similares y termina recabando los comentarios de Alonso Ercilla, del “Trading Standards Institute”. Entre las opiniones vertidas por este experto, al que le han contado toda la historia, me gustaría destacar las siguientes:
Este artículo continúa narrando otros casos similares y termina recabando los comentarios de Alonso Ercilla, del “Trading Standards Institute”. Entre las opiniones vertidas por este experto, al que le han contado toda la historia, me gustaría destacar las siguientes:
- "Some of the quotes are just shockingly low," [algunas de las valoraciones son sorprendentemente baja s]
- “offering a low price for gold might be irritating but it's not illegal” [(el hecho de) ofrecer un bajo precio por el oro puede resultar enojoso (para mí), pero no es ilegal]
- "Customers need to shop around and try to establish the price per gram” [los consumidores tienen que ir a varias tiendas (joyerías) para enterarse del precio (del oro) por gramo]
Como podemos ver, en este reportaje de la BBC, en el Reino Unido las empresas de tele–compra de oro se están forrando a base de bien. La pregunta que a todos os rondará por la cabeza es: ¿esta situación se está dando en otros países?
Desgraciadamente no puedo comprobarlo personalmente puesto que estoy pasando una temporada en el extranjero, y no he traído conmigo mi baúl de joyas. No obstante, invito a que los lectores de este blog comenten su caso, si es que se han metido en esto de la venta de sus antiguos objetos de oro para sacarse un dinerillo.
Nota: según el diario digital OroyFinanzas.com, la onza troy (utilizada únicamente en joyería, orfebrería y numismática para pesar metales preciosos) equivale a 31,1034768 gramos. Suponiendo que el oro cotizara en los mercados internacionales a 1.000$, el precio del oro de 24 kilates (el más puro) se situaría en torno a los 32$ por gramo, es decir, unos 22€ al tipo de cambio actual.
Referencias:
- “What's the 'true' value of your old gold?”. BBC, Newsbeat.
- Trading Standards Institute
- Unidades de peso para el oro. Www.oroyfinanzas.com
Fotografías:
- “ring/yüzük”, by Caucas', under CC. license, some rights reserved
- “ouro.22.k” by Wilson Neto, under CC. license, some rights reserved
- “The Crown jewels at The Tower of London”, by Edgley Cesar, under CC. license, some rights reserved
- “Gold Bracelets” by MuseumWales, under CC. license, some rights reserved